Hay una máxima en el mundo de la tecnología que dice Eat your own dog food, que si obviamos traducciones directas, significa que el software que desarrollas has de usarlo para comprender mejor que funciona, que es lo que está fallando y sobretodo, como mejorar. Esta teoría que no se si viene del mundo de Lean, Scrum o de vete tu a saber donde es también aplicable al mundo de los complementos alimenticios.
Quizás porque tengo un pasado muy relacionado con las nuevas tecnologías pero este principio lo he mantenido en esta aventura en los que me han dejado participar los componentes de Push Bars, que es básicamente usar los productos que estoy promocionando. Tengo la ventaja que ya practicaba deporte, ni running ni nada parecido, sino algo más prosaico como el baloncesto pero los principios químicos son parecidos.
Os cuento mi rutina, antes de ir a entrenar, aproximadamente una media hora antes suelo tomarme una barritas de gelatina. No tengo manías con lo sabores pero la que me tiene robado el corazón es la de limón y a la hora de finalizar el entreno me zampo un Flash Recovery de Cacao.
Reconozco que no os puedo hacer una valoración química, ni proteica ni de nada de esto, es simplemente mi percepción personal y asumo que cada persona es mundo y lo que a mi me funciona para otro puede ser una castaña pilonga. La verdad es que desde que consumo estos productos voy menos cansado, tengo más energía y al día siguiente ya no tengo que discutir con mis viejas amigas las agujetas, que ahora se que es ácido láctico y que es un desecho del metabolismo que cristaliza y provoca molestias en el cuerpo.
Digo esto porque es importante, al menos para mí, poder creer en los productos con los que estoy involucrados, más allá de mis conocimientos técnicos porque es de cajón que no tengo tiempo para saber de todo y tengo que apoyarme en expertos que desarrollan las formulas para que sean no solo eficaces, sino eficientes. Yo puedo discutir de sabores, texturas, pero no de bioquímica, y en verdad los productos que tenemos son realmente extraordinarios desde un punto de vista organoléptico, son sabrosas y con buena textura en el paladar además de lo que ha de tener esta línea, que sean funcionales.
Cuando vas a ver a clubs, tiendas o atletas es algo muy importante, porque has de creerte que el producto funciona, pero más allá de creértelo has de haberlo probado en tus propias carnes para transmitir las sensaciones de la forma más fidedigna posible y no porque has preparado un argumentario, no solo lo estás promocionando, sino que lo consumes, te funciona y crees en su utilidad. Luego podemos entrar en que cada persona es un mundo y hay personas a los que no les gusta el marisco y otras que suspiran por unos percebes, cada persona es un mundo propio.
En resumidas cuentas, saber que lo que tienes entre tus manos no es solo un producto más, sino algo que te funciona, que puede funcionar a más gente, y que encima esta delicioso es un punto importante para mí y para todos los que trabajan aquí y por eso contamos con que os pueda servir también a todos y que aquí nos tenéis para escuchar vuestro punto de vista y vuestras experiencias.
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